El curso ya ha comenzado

Ya ha llegado septiembre y con él el comienzo del curso. Otro año más abrimos libros y cuadernos para prepararnos a alcanzar nuestras metas y objetivos personales.

Como cada año, la academia se prepara para un gran ajetreo, y los nervios están a flor de piel. Todos tenemos un cometido claro y siempre lo cumplimos.

Secretaría.

La cara de la academia está muy atareada con matrículas, nuevas inscripciones e información de libros y cursos. Casi no se ven las cabecitas de nuestras secretarias detrás de tanta gente, pero son tan resolutivas que ayudan a todos con una gran sonrisa. El trabajo administrativo es muy minucioso, y es un engranaje muy importante para que las clases funcionen correctamente. Los primeros días, muchos alumnos no saben dónde está su clase o quién es su profesor, así que ellas están pendiente de todo y de todos.

Los profes.

Sincronizados con las secretarias, ayudan a ubicar nuevos alumnos, llamar los suyos y acomodarlos en clase. La primera clase es muy importante, sobretodo si el alumn@ es nuev@, ya que las primeras impresiones son decisivas. Normalmente el primer día de clase se aprovecha para ponerse al día, refrescar el inglés atrofiado por el verano y conocer caras nuevas. Es un proceso muy bonito ya que para todos, profes incluidos, es una primera toma de contacto que se hará cada vez más fuerte.

La dirección.

Finalmente el organismo que ayuda a todos los departamentos es la dirección o coordinación del centro. Es como la enciclopedia, tiene todas las respuestas a todas las dudas, tanto de secretaría como de profesorado. Nos ayuda en todo momento y se asegura de que todos hayan encontrado su clase, tengan su material y que las clases hayan empezado a tiempo.

Todo este mecanismo que parece un reloj suizo, hace que cada año nos superemos en conseguir los mejores resultados para nuestros alumnos.