5 cosas que no hay que hacer cuando estudiamos inglés
Siempre os contamos trucos de cómo poder mejorar vuestro aprendizaje del inglés, como avanzar a pasos agigantados disfrutando del camino. Pues bien, hoy os vamos a contar qué cinco cosas no debemos hacer cuando estamos estudiando inglés, porque entender los caminos equivocados también es importante.
1. Lo quiero todo y lo quiero ahora.
Es fundamental comprender que cada persona necesita su tiempo para asimilar nuevos conceptos y finalmente ponerlos en práctica. Cuando aprendemos inglés es importante comprender esto. Es verdad que lanzarnos al vacío para intentar formular alguna frase es muy positivo, pero siempre de una forma responsable, puesto que nuestros errores pueden convertirse en costumbres, lo que nos llevaría a un uso incorrecto del idioma. Sé paciente y mira bien tus limitaciones para poder trabajar con ellas. Si necesitas dedicarle más tiempo a la pronunciación por ejemplo, o a la lectura para mejorar tu comprensión.
2. Demasiada gramática deja un amargo sabor de boca.
No nos malinterpretéis. La gramática es super importante, nos ayuda a hablar correctamente, sí, pero todo en su justa medida. No te obsesiones con ella. Cometer errores es algo normal y debes aceptarlo. Cuando estudias algo de gramática procura que seguidamente veas la luz con una actividad de hablar donde puedas poner en práctica lo que acabas de aprender. Que no todo sea rellenar huecos y completar frases. Métete de lleno en una situación y deja que la gramática sea algo natural y no algo de memorizar.
3. Busca ayuda. Hay millones de formas de aprender inglés.
Academias, profesores particulares o cursos online. Busca el que mejor se adapte a ti pero que tenga un soporte que pueda resolver tus dudas. Bien es sabido que Internet nos puede responder a cualquier tipo de pregunta, pero siempre es mejor que tengas a un referente a tu lado que te guíe, así te sentirás más seguro cuando consultes tus dudas.
4. No creas en los milagros.
Con esto queremos hacerte entender que un par de horas de clase a la semana te ayudan, pero no es suficiente. Debes cambiar el chip de tu mente y mantener el contacto con el inglés todos los días a ser posible. No lo abandones, no cierres el libro hasta la próxima clase porque tu cerebro por muy inteligente que sea necesita estar constantemente activo. Series, libros, revistas, reuniones de intercambios lingüísticos, las posibilidades son infinitas y todas puedes adaptarse a tu estilo de vida. Encuentra la tuya.
5. No te pierdas entre correlaciones.
Siempre te lo decimos, traducir no es la solución. Muchas veces la correlación de una frase o expresión en inglés no existe en español, y nos perdemos. Deja de pensar en lo que podría ser y quédate pensando en lo que realmente es: otro idioma. No te pedimos que pienses en inglés, o que atasques tu mente con millones de palabras que no tienen una traducción. Deja de pensar, deja fluir tus conocimientos, todo está en tu cabeza solo debes abrir el cajón donde lo tienes guardado. Confía en tus habilidades.